PROYECTO DECADAS

DIARIO WWF


"STYLES CLASH"




La lucha que viene ahora fue el MOTY para la redacción de Social Topcast, próximamente tendremos la del ganador del previo. Shinsuke Nakamura vs Sami Zayn.




La lucha la podéis encontrar aquí. Como recordatorio, para los que no me siguieráis en StylesClashBlog, mis reviews constan de una introducción o contexto, un desarrollo en el que narraré lo acontecido haciendo acotes y la review en sí a modo de conclusión:


CONTEXTO:


Roman salió tocado de WM. Su combate ante HHH fue simplemente inadmisible por varios factores que todos conocemos y que perjudicaron a una lucha inadecuada, pero que no estuvo tan mal. AJ salió hundido tras perder con Jericho en un momento en el que todos nos temimos lo peor con The P1 quedando en el limbo tras un feudo decepcionante.

Sin embargo, ocurrió el milagro. AJ ganó una FFW haciendole el pin a Y2J para ir a por el campeonato de  Roman. El hype se disparó para muchos cuando además el feudo respondió. Roman dió un paso al frente, con una actitud más sobrada y confiante y AJ se libró de esa incomodidad en las promos para dar paso a un hombre más natural, orgánico, profundo y ambicioso.

AJ, bandera del wrestling fuera de WWE iba a luchar contra Reigns, la cima de la montaña de la WWE por el campeonato número 1 del planeta.
El mejor del mundo en los últimos dos años contra "The Guy" de la empresa de máxima importancia.
Dos personas con trayectorias y estilos contrapuestos pero que tenían algo en común. Ser jodidamente buenos. Y ese choque de personalidades y de estilos no iba a decepcionar.


DESARROLLO:

AJ Styles entra como siempre pero con una reacción del público superior. Este feudo le ha hecho ponerse mucho más over que sus últimos 2 meses. Entra Roman y el público estalla mayoritariamente en abucheos. El ambiente en contra es evidente, pero es que además se siente que lo de esta noche es importante.

Eden presenta a cada uno y se me escapa la sonrisilla de "esto hace un año era inimaginable". Y es que esto es muy grande. El público está encendido como en unas finales de la NCAA.

Comienza el combate y tenemos unos segundos de tanteo inicial, pero ambos se detienen. El público canta unánime "AJ STYLES" y Roman suelta una leve sonrisa ante lo que se le viene. Primer forcejeo para Reigns, que envía sin dificultad a Styles a la esquina de un empujón despertando abucheos. 1-0. De nuevo una mínima pausa mientras arrancan unos claros y cómicos "You can´t wrestle"

AJ coloca un headlock e intenta tirar a Reigns con él, pero no puede y este le levanta como una pluma para quitárselo de encima sin atacar. Por si había la más mínima duda, Roman está muy por encima físicamente.




Roman levanta a AJ de nuevo pero este logra liberarse y conectar una dura patada. De nuevo pausa, pero AJ logra este microround. Espacio de nuevo mientras Roman se duele de la pierna. AJ busca otro forcejeo pero rápidamente se separa para conectar varias patadas como las que le funcionaron antes y logra un wrist lock pero de nuevo Roman se lo quita de encima usando ahora una variante de back body drop. Styles corre a las cuerdas y logra conectar un arm drag throw que envía a Roman a ringside. En estos segundos de pausa, AJ sonríe. Otro miniround.

Esta vez la cosa cambia. Roman sabe donde tiene la ventaja y con calma acorrala a AJ y le lanza violentamente al esquinero pero Styles reacciona y le propina un golpe en la cara que enfurece a Reigns. AJ se siente cómodo y sale del ring para retarle. Reigns le persigue de nuevo al cuadrilátero donde Styles se aprovecha para golpearle con patadas y pisotones. Roman se incorpora y AJ le aplica chops y puñetazos de los que Roman se duele pero parece resistir sin problemas. AJ busca impulsarse en las cuerdas y es sorprendido por un potentísimo shoulder block que envía a Styles a ringside gracias a la anticipación del de Pensacola. No va a ser tan fácil.





AJ se lamenta doliéndose en ringside y sube de nuevo con ciertas dudas que despeja a base (de nuevo) de rápidas patadas e intenta sujetar la pierna de Reigns obteniendo un potente golpe en la espalda por parte de este, que le envía a la lona. Roman le levanta y repite el golpe, plasmando su enorme superioridad en fuerza. Irish whip de Roman al que AJ responde con una patada, consiguiendo además cortar un intento de comeback con un forearm para luego intentar german suplex del que Reigns se libera con fuertes codazos. Roman va de nuevo a las cuerdas y AJ le sigue, pero Roman se da la vuelta y conecta una tremenda clothesline. AJ contaba con su velocidad, pero su plan se está torciendo poco a poco.

Roman aplica un roll up que transiciona con una facilidad insultante en una tremenda one arm powerbomb. Ni siquiera busca el pin, solo está destrozando a ese pequeño insolente. AJ se agarra a las piernas de Roman para tratar de levantarse. No hará falta porque Roman le aplica una potente deadlift sitout powerbomb  que acaba en nearfall. AJ está muy castigado.





Roman sabe que lo tiene y carga el superman punch pero es interceptado en pleno movimiento por una preciosa standing enzuigiri de AJ que impacta de lleno en Reigns, quedando aturdido. Tras unos segundos Roman vuelve a por Styles, que le castiga con su combination. Roman rebota, AJ le aplica una snapmare para rematar con un running forearm smash. La genial comeback le devuelve cierto dominio al ex de NJPW que intenta un pin del que Roman sale forzado pero a solo 1,5.
Roman intenta recuperarse pero AJ lo recibe con un precioso ushigoroshi. La cuenta ahora ha acabado en nearfall.

Styles castiga en la esquina a Roman y va a por un corner forearm pero Roman le lanza por encima. AJ responde con un forearm y sube a las cuerdas pero Reigns se anticipa y le sujeta en posición de Samoan Drop, de la que AJ logra salirse. De nuevo posición de german suplex y codazos de Roman pero es una trampa. AJ esquiva y saca su finisher de sumisión, el calf crusher. Roman lo vende como si le estuvieran mutilando su ya levemente castigada pierna. Son apenas unos segundos ya que Reigns logra alcanzar las cuerdas a la desesperada, pero que segundos. Aquí pudo cambiar todo.




Roman está fuera del ring y además ha recibido otro impacto en la cara por lo que se apoya en la mesa. La opción es demasiado clara y AJ no perdona. Lanza su Phenomenal Forearm en uno de los spots del año, arrasando a Reigns y colapsando la mesa de comentarios.





El árbitro inicial la cuenta y AJ logra incorporarse. Intenta meter a Roman en el ring, ya que el count out no vale para el título pero no le da tiempo porque Roman está totalmente ido por lo que le abandona fuera y logra ingresar a tiempo. Se acabó. AJ ha ganado a Roman Reigns, pero por count out, lo que no le vale para ganar el título. Por suerte, Shane McMahon, nuevo manager de la WWE (recordemos que debido a los acontecimientos de WM Vince le permitió a Shane gestionar también la programación en esta "nueva era") aparece para reiniciar el match, esta vez, sin count out diluyendo el anticlimático final.

AJ es inteligente y rápidamente mete a Roman en el ring y sube al esquinero para lanzar su 450 splash, pero Reigns se arrastra a duras penas fuera de su alcance. AJ baja y va a por el, a lo que Roman responde creando espacio con un jawbreaker que es contestado por varios forearms, la combination y la Pelé kick. Ahora si, coloca a Roman cerca de la esquina y lanza una 450 splash que se encuentra con las rodillas del campeón. Reigns cubre y la cuenta es de sólo dos. Roman se duele de nuevo de sus piernas.

Ambos avanzan con dificultad a la esquina opuesta, donde AJ parece rehacerse, sube a la segunda cuerna para buscar un forearm y lo lanza. Roman responde lanzando un puñetazo instintivo que acaba en la entrepierna. Dq. AJ ha vuelto a ganar y de nuevo, tampoco sirve para salir campeón.
Es ahora Stephanie la que interviene, reiniciando la lucha en no disqualification.

Roman tiene ahora la ventaja y su cara dibuja la enorme opción que tiene. Agarra a AJ, que responde con puños pero no sirve de nada porque le arroja como un monstruo a la esquina para continuar la acometida, tirándole del ring.

                 


Reigns le estampa ahora contra los escalones y la mesa de comentarios en español para luego aplicarle una big boot sobre la barricada. Mini botch (AJ no cae al otro lado) que solucionan bien. AJ queda colgando penosamente y Roman le agarra para luego tirarle con impulso. Roman cruza pero Styles logra crear espacio y aplicar una running clothesline que tira al campeón al otro lado. Roman se apoya en la mesa y recibe un jumping knee drop. AJ ha vuelto a revertir la situación.

Styles mete en el ring a Roman. Es su momento. Phenomenal forSUPERMAN PUNCH!




Styles cae seco y Roman busca un pin que queda en 2,5. Solo necesita eso Roman para cerrar el combate. Roman no se lo cree y se enfada. Acecha a un aun aturdido Styles que al no levantarse provoca más castigo. Roman le levanta y le aplica otro Superman Punch. Sin piedad.





Roman tiene a AJ donde quiere pero entonces, aparecen los otros fichajes de WWE. Anderson y Gallows, los viejos amigos de AJ que habían asegurado que no intervendrían aparecen para ayudar a Styles. Logran reducir a Reigns y aplicar su Boot of Doom. Tras salir del ring, ayudan a un AJ que se logra incorporar. Es el momento perfecto, ahora sí. Styles aplica el phenomenal forearm. El fake finish del año.






AJ le estaba cubriendo totalmente y el cuerpo de Roman no se movió pero logró acercar la pierna de forma pesada  en el último suspiro. The Usos (primos de Roman) aparecen para impedir una nueva intervención de The Club. El brawl se forma en ringside mientras AJ sube al esquinero para intentar otro move aéreo, pero Reigns reacciona empujando a Styles tirándole contra los dos tag teams. Tras varios segundos Roman se incorpora para lanzarse por encima de la tercera cuerda contra todos. Roman grita celebrando y es que no se da cuenta de que Styles esquivó en el último momento.
El de Georgia sube a la barricada y desde ahí lanza un flying forearm que noquea a Reigns. AJ vuelve a tener match ball.

Styles mete en el ring al powerhouse y aplica el superman 450. Reigns se sale a 2,5 por lo que AJ intenta lo que no ha podido hacer en todas las semanas anteriores. Styles intenta el Styles Clash pero falla y Roman lo revierte en un back body drop al exterior del ring. Roman carga su superman punch pero es interceptado comiéndose las cuerdas. Es ahora o nunca. Styles lanza su phenomenal forearm por última vez pero Roman corre hacia adelante, ambos se impulsan en las cuerdas y SPEAR! Reigns se arrastra y pone su brazo sobre AJ. La cuenta es de 3.





Roman lo ha conseguido. Sale de aquí como campeón de la  WWE ante un público ahora dividido.



ANÁLISIS:

Una jodida maravilla. Roman Reigns y AJ Styles brillan con una luz tremenda en un match ridículamente rico en detalles. Se me hace muy difícil imaginarme este match, con este desarrollo y dos wrestlers de características similares y que el resultado sea remotamente parecido.


Styles prueba que es el mejor del mundo. Sus comebacks resultan geniales y creíbles y su trabajo en el selling es magnífico. El 99% de cosas que hace tienen todo el sentido del mundo en el momento de realizarlas.

Reigns prueba que es el hombre. O mejor dicho, la bestia. Roman se acomoda en el papel de powerhouse. Sabe cuales son las virtudes de su rival y las supera usando su evidente ventaja física pero de manera inteligente, en lugar de caer en lo fácil como hacen la gran mayoría de powerhouses.

El combate arranca con un tanteo que define claramente el rol de cada uno, pero lo hace de manera orgánica y natural. El combate va ganando en intensidad poco a poco pero de manera constante, al ritmo que marca el aprendizaje de cada peleador. Nunca se habían enfrentado y a medida que pasan los minutos muestran más conocimiento sobre su oponente.

Al llegar al nudo se muestra como ambos pueden vencer a su oponente a su manera, luciendo los dos igual de peligrosos. El tramo final es un carrusel de emociones en el que echan el resto de sus recursos sin olvidar todo lo que ha pasado antes.

Lo bonito de esta lucha es, como dice el título, el choque de estilos pero muy en parte al "como" sucede este choque. Una de las cosas que mata a luchadores, combates, chistes, películas y demás es forzar la situación. ¿Cuantas veces hemos visto a un powerhouse ágil hacer 20 spots que demuestran lo fuerte y ágil que es? Parecen chistes de GTA, explicados y requetesobados para que hasta el más tonto los pille.

Pero aquí no. Roman es una bestia porque cada acción que hace contra AJ luce brutal, hasta algo tan simple como agarrarle y tirarle al esquinero. Roman no quiere exhibirse, quiere marcar territorio y vencer a un rival temible como AJ. Y es que AJ es un rival temible. Pese a la enorme diferencia de tamaño, es mucho más ágil y tiene un repertorio casi infinito de recursos. Y estos lucen devastadores de verdad.

El selling y bumping de AJ elevan a un tremendo Roman a la categoría de bestia, lo que a su vez hacer que cada vez que Styles logra superar a Reigns (sin quedarse atrás este en selling) luzca como alguien único, capaz de convertir a un gladiador de la fuerza y el talento de Roman en alguien vencible, pese a la evidente diferencia física. Los dos se alimentan mutuamente, formando un círculo virtuoso en el que ambos se hacen mejores. Que sus estilos sean tan diferentes enriquecen aun más el conjunto. La agilidad se mezcla con la fuerza, todo salpicado de enorme inteligencia dando la sensación de que cualquier momento puede decantar la lucha, al usar los wrestlers sus dispares recursos de manera tan eficaz.

Ha habido muchas quejas sobre el sobrebookeo, pero he de reconocer el mérito de insertar tanta intervención de manera tan coherente respecto a lo contado en los semanales y que sea funcional en la lucha.

Una reflexión muy interesante que leí en ForosWrestling decía que para que una lucha se sintiera con sentido se debía dar un choque de narrativas y al final, el ganador debía imponer la suya. Y esto pasa aquí. Styles es genial y logra superar a Roman por dos veces, pero la situación (ventaja de campeón) favorece a Reigns que finalmente consigue la victoria por algo muy sencillo. Sin despreciar la variedad de recursos de Roman, Styles aquí es muy superior. Sin embargo y como se muestra cuando Roman consigue conectar un move potente (powerbombs o superman punch) la situación cae de su lado puesto que la diferencia física y de poderío es notable. En un leve resquicio, Roman aprovecha el impulso de AJ para conectar su move One Hit K.O. , la spear, logrando retener.

Para alguien como yo, muy fan de los videojuegos, resulta difícil no ver un paralelismo. AJ es tu personaje, poderoso pero relativamente endeble en cuanto a resistencia y con mil recursos. Roman es ese final boss resistente como nadie, con unas cuantas técnicas muy adecuadas para el y con un poder de ataque MUY superior al tuyo. Un error y estás acabado. Y esto es lo que pasa aquí. El final boss logra conectarte su movimiento más potente en el crítico momento en el que ya lo tenías y fuiste con todo a por él, derrotándote de manera contundente. Puedes estar enfadado pero esta batalla ha sido tan divertida y se ha sentido tan justa que no apagas la consola, sino que aprietas "continuar".

Por si fuera poco el match está lleno de detalles como ese fake finish de Reigns poniendo el pie en la cuerda o ese espectacular spot del PF para atravesar la mesa. El primero por la genialidad al hacerlo, el segundo por su perfecta ejecución y espectacularidad. Y momentos así hay en toda la lucha.

Estamos ante un match redondo, con detalles a millones y en el que sus dos protagonistas brillan con luz propia. Sin embargo, he de reconocer que en directo, las intervenciones (las de Shane y Stephanie concretamente)  me sentaron mal y me rompieron algo el ritmo. El match envejece genial, pues esto no pasa al revisionarlo pero en su momento enfriaron algo la situación y esto es algo de valorar ya que la impresión en directo es clave en un espectáculo así.

Esta es la única pega que le puedo poner. Sí, quizá el enfrentamiento de Extreme Rules fue también sobresaliente en ejecución, un poquito más divertido, sin cortes de ritmo y se sintió más concluyente, pero el motivo por el que este match es tan genial es porque Reigns y Styles simplemente dan una exhibición que solo está a su alcance. Convierten un papelón (match sobrebookeado, no concluyente y su primer enfrentamiento) en algo mágico y casi inmejorable.

No es perfecto, pero sí un imprescindible. ****3/4          



@AlbertoTamame20                             

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